Jacobo Martínez

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En el entorno profesional muchas veces nos preguntamos cuál es el secreto de algunas compañías que, de la noche a la mañana, parece que han aumentado sus ventas exponencialmente o se han expandido a todo el globo casi por arte de magia, convirtiéndose en la Coca-Cola de su sector. ¿De dónde han salido? ¿Cómo es que nadie antes veía la posibilidad de hacer algo igual? No esta mal reflexionar sobre ello, aunque en algunos ámbitos, como el del comercio electrónico, la cosa es blanca y en botella.

Lo diré claro, porque aún hay muchos que se preguntan por qué Amazon va a dominar el globo del e-commerce todavía más de lo que lo domina.

Situación del comercio electrónico en España, a 2 de noviembre de 2010: sigue saliendo más barato comprar en Inglaterra y en Estados Unidos. Verdad verdadera que dirían los de Yoigo… Con esto resumo de forma cruel 14 años de comercio electrónico en nuestro país. Y no, no es porque la libra vaya por los suelos, ni el dólar esté a precio de saldo (que también). Es porque las tiendas «online» americanas hace mucho, muchísimo tiempo, que entendieron que para batir al comercio físico, el virtual tenía que ofrecer alguna de estas ventajas:

– mejores precios que en cualquier tienda física
– gastos de envío bajos, o incluso inexistentes
– tiempos de envío muy reducidos
– buen servicio de atención y devolución
– información de producto veraz y detallada

Amazon directamente las ofrece todas. Y claro, si a eso le sumas que aquí en nuestro querido y soleado país se hace lo contrario, pues ya tenemos la clave. Se supone que El Corte Inglés es uno de los almacenes con mejor logística de España (si no el mejor). Sin embargo, puedo dar fe, -al igual que cientos de miles de compradores- que nada de lo que he pedido ha llegado jamás antes de una semana. La media siempre ha estado en 10-15 días para artículos que posiblemente podría recoger esta misma tarde en cualquiera de sus centros asociados, ahorrándome 9 euros de gastos de envío.

Pero ojo, que según datos fiables, estadísticas y tralalá, resulta que ECI es el comercio electrónico que más vende en Spain. Po fale. Con eso me lo has dicho todo Manuel… Marcaré ahora mismo, de la lista de arriba, los items que cumple www.elcorteingles.es: mejores precios? (a veces). gastos de envío (caros). tiempos (eternos). servicio de atención y devolución (muy bien). información de producto (deficiente).

Caso real: Gladiator – Edición coleccionista 2 discos:

España:

22.99 euros – FNAC (gastos no incluidos)
22.50 euros – El Corte Inglés (gastos no incluidos)
21.99 euros – DVDGO (gastos no incluidos)

Inglaterra:

14.95 euros – Zavvi.es (envío gratis)
11.50 euros – Amazon Inglaterra (gastos no incluidos)

Es decir, que sin contar los gastos de envío, ya de entrada hay 10 euros de diferencia en un producto tan simple como un Blu-ray. Insisto, ya sé que la libra juega a nuestro favor… pero es que a un inglés le cuesta todavía más barato que a nosotros.

Quizás el de este Blu-ray es un ejemplo algo cogido por los pelos, porque las distribuidoras videográficas en España son aves de rapiña, y además, para saber qué ediciones inglesas llevan audio en castellano hay que estar pendiente de foros especializados como los de mundodvd, pero es que con cualquier otro producto la cosa suele repetirse.

¿Otro ejemplo?

Disco duro ultrafino Western Digital My Passport 1TB:

España:

139.90 euros – FNAC (gastos no incluidos)
217.70 euros – El Corte Inglés (gastos no incluidos)

Inglaterra:

115.00 euros – Amazon Inglaterra (envío gratis)

Caso real:

Hace unos meses pedí a ECI una XBOX 360 Elite. A las dos semanas cancelé el pedido, porque no llegaba. Decidí «arriesgarme» y pedirla en Amazon Inglaterra. Me salía por menos dinero que en España, y encima me regalaban 2 juegos y un mando adicional. En total pagaba unos 230 euros por un producto que aquí me habría costado unos 300 euros. Os juro que a los cuatro días estaba en mi casa. La pedí un lunes y llegó un jueves. ¡Desde Inglaterra!

Para mi, las claves están muy claras; Amazon se preocupa por ofrecer lo que el cliente necesita, al precio más justo posible, y luego de ahí, monetiza lo que puede. Tiene asumidas determinadas pérdidas con los gastos de envío, con las devoluciones y con los extravíos, pero jamás, Y DIGO JAMÁS, descarga esa responsabilidad en sus usuarios.

En España el comercio electrónico de «los grandes» es una tomadura de pelo en varios de los eslabones que forman la cadena. FNAC tampoco se libra de esto, y aunque ha mejorado muchísimo en ofertas y en envío de productos, siguen siendo deficientes en los tiempos de entrega y en la gestión de pedidos.

Por otro lado hay, o hubo, tiendas que en su día lideraron el comercio electrónico en España (como DVDGO), pero que ya no están a la altura de lo que se espera hoy en día. Por eso es comprensible que Redcoon triunfe por sus agresivos precios, y que Amazon haya comprado BUYVIP por su equipo humano. Ambas tienen características fundamentales que son los cimientos sobre los que se basa Amazon: PRECIO, ENVÍO Y ATENCIÓN.

Por eso, cuando me dicen que el e-commerce en España está que arde, yo les digo que no han visto arder nada todavía. Que el día que llegue Amazon de verdad aquí, que se echen todos a temblar.